PANORAMA DES DEL PONT

Un personaje marginado en su país, en su gremio y hasta en su familia.El clásico de Arthur Miller pero con pasas y piñones, a la catalana.

Murió en 2005. Un autor que no sólo escribió teatro como un ángel caído, sino que incluso desposó a Marilyn Monroe. Eso es ser grande. Arthur Miller, inmenso en la dramaturgia estadounidense y terrícola del siglo XX, cimentó sus mejores obras sobre personajes de a pie que se dan de cabeza contra la sociedad. Lo hizo en clave contemporánea de clase media con su magistral La muerte de un viajante (1949). Luego repitió el esquema, renovándolo con genio y ambientación histórica, en Las brujas de Salem (1953). Poco después, en 1955, estrenó su otro drama tutelar sobre la alienación en comunidad. Ése que hoy, traducido al catalán, desembarca como Panorama des del pont. Aquí, el hombre jodido por su entorno se llama Eddie Carbone. Nació en Italia, pero reside en Nueva York. Un inmigrante trabajador, pero ilegal. Un tipo cualquiera, pero enamorado de una sobrina. La vida de Eddie está llena de peros que le acaban estallando dentro. Tenso, enceguecido, arremete contra los suyos. Le juega sucio a su familia. También traiciona a sus compañeros de los muelles. Quiebra la omertà, la ley del silencio que impera entre los estibadores, gente que no se anda con tonterías. Una tragedia irrisoria, de sólo un pobre diablo, que conmueve a todo aquél con las tripas bien puestas. Gracias a un elenco solvente y al pulso que sabe mantener el dire Rafel Duran y a una pluma escénica de una sencillez demoledora. Don Arthur Miller.
PANORAMA DES DEL PONT.
Autor: Arthur Miller.
Director: Rafel Duran.
Con: Albert Ausellé, Toni Sevilla.
TNC. Sala Petita. Barcelona.
Del 2 de febrero al 26 de marzo.